domingo, 26 de octubre de 2014

LA ESTATUA DEL ARZOBISPO ALMEIDA Y MERINO EN LA CIUDAD DE CHIHUAHUA

LA ESTATUA DEL ARZOBISPO ALMEIDA Y MERINO EN LA CIUDAD DE CHIHUAHUA

ÓSCAR ROBLES

         La escultura del Arzobispo Adalberto Almeida y Merino fue develada hace unas semanas en el Parque Infantil de la Ciudad de Chihuahua. Es un gran homenaje a este destacado prelado mexicano que fungió como arzobispo de la capital del Estado de Chihuahua entre 1969 y 1991 y tuvo un papel destacado en la emergencia civil de los ciudadanos chihuahuenses que exigían elecciones políticas limpias durante la década de los ochenta.
     El escultor defeño Carlos Espino es autor de dicha obra escultórica de corte religioso. Espino cuenta con una numerosa obra escultórica, la mayoría de forma figurativa y de estilo realista.
         La figura de Almeida se encuentra justamente en la esquina de las Avenidas Cuauhtémoc y Mirador, muy cerca del  edificio del Arzobispado de la Ciudad de Chihuahua. Esta escultura muestra al distinguido funcionario religioso de pie, con un brazo levantado, investido en su clásica vestimenta de arzobispo.
     Carlos Espino (1953―) estudió en la Escuela Nacional de Artes Plásticas “San Carlos” de la Ciudad de México. Sus obras más celebradas son las siguientes: 1) Tabzcoob (1981) situada en Villahermosa, Tabasco; 2) La Ofrenda (1982), en la Basílica de Guadalupe de la Ciudad de México; 3) El General Felipe Ángeles (1989), estatua ecuestre en el estado de Zacatecas; 4) la estatua ecuestre del General Emiliano Zapata (2001) en la Ciudad de Chihuahua.
         En Chihuahua, a partir de 2004, Espino creó las esculturas de los ex-gobernadores Rodrigo M. Quevedo, Manuel Bernardo Aguirre y Óscar Flores Sánchez y de las cuatro figuras de Los Héroes de Tomochi.
        En tanto, Adalberto Almeida y Merino (1918-2008) es nativo de Bachíniva, Chihuahua, Trabajó como Obispo de la ciudad de Tulancingo, Hidalgo (1956-1962) y de la ciudad de Zacatecas (1962-1969), y como arzobispo en Chihuahua evangelizó a numerosos marginados de la sociedad, estableció nuevas órdenes religiosas y fundó diversas capillas (“Adalberto”). Su cuerpo permanece sepultado en una cripta de la Catedral de Chihuahua.
         Con la nueva y hermosa escultura pública del artista Carlos Espino, los ciudadanos pueden recordar a uno de los grandes arzobispos de la capital del Estado de Chihuahua. De este modo, los chihuahuenses rinden homenaje a sus héroes, a sus políticos, a sus líderes religiosos, a sus deportistas y a los grandes creadores de la cultura regional y nacional, mediante la creación de este tipo de esculturas figurativas de estilo realista. Es una forma de cultivar la memoria histórica de una nación.


Obras citadas
“Adalberto Almeida y Merino.” Wikipedia. La enciclopedia libre. 26 octubre 2014. A
“Carlos Espino.” www.carlosespino.com.mx.


ADALBERTO ALMEIDA Y MERINO, ARZOBISPO DE LA CIUDAD DE CHIHUAHUA ENTRE 1969 Y 1991

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