ALGUNAS CUESTIONES IMPORTANTES SOBRE LA SUCESIÓN PRESIDENCIAL EN MÉXICO EN 2024 Por Óscar Robles

Elegir al presidente de México es una tarea difícil. Los partidos políticos optan por el mejor candidato, de acuerdo con sus intereses grupales y de la nación. Por su parte, los ciudadanos deben investigar la trayectoria profesional y política y la biografía de los candidatos en cada elección y votar para fortalecer la democracia y la vida civil de un moderno Estado-nación. Es recomendable consultar en Internet suficiente información sobre los candidatos de todos los partidos, para llevar a cabo una acertada elección. Wikipedia es una fuente confiable. 

He aquí unas breves y significativas reflexiones sobre la elección presidencial en México en 2024: 

1. El próximo presidente de México debe haber desempeñado eficientemente el cargo de gobernador en el siglo XXI. El guanajuatense Vicente Fox, el mexiquense Enrique Peña y el tabasqueño Andrés López Obrador fueron gobernadores estatales y jefe de gobierno de la Ciudad de México, respectivamente, antes de ocupar el Palacio Nacional como primeros mandatarios de México. En la actualidad, pueden ser buenos candidatos presidenciales, por haber sido o ser gobernadores y jefes de gobierno, los siguientes funcionarios de diferentes partidos políticos: Los morenistas Marcelo Ebrard y Claudia Sheinbaum (Ciudad de México) y Adán López (Tabasco); los panistas Mauricio Vila (Yucatán), Maru Campos (Chihuahua), Mauricio Kuri (Querétaro) y Juan Carlos Romero Hicks (Guanajuato); el miembro de Movimiento Ciudadano Enrique Alfaro (Jalisco); y el priista Alfredo del Mazo (Estado de México). 

Un puesto ejecutivo regional es mejor para ser presidente de la nación porque los gobernadores y jefes de gobierno defeños promovieron reformas de leyes, brindaron gran obra pública, atrajeron las inversiones y estuvieron en contacto directo con las necesidades reales del pueblo. 

2. Puede ser un mejor presidente o presidenta el / la que haya trabajado en diversos puestos de elección popular ejecutivos (gobernador, alcalde), legislativos (diputado federal, senador) y del gobierno federal (secretarios de Estado) y el/ la que tenga estudios universitarios de licenciatura y posgrados en carreras de administración pública y/o economía. Ante todo, el país es un macro negocio que requiere conocimientos especializados y sofisticados en materia económica y una de las veinte más grandes economías del mundo. 

3. ¿Puede un gobernador con experiencia empresarial generar votos a favor en 2024, dentro de un país con 56% de trabajadores informales, más de 25 millones de personas dependientes de programas sociales del gobierno federal actual y millones de ciudadanos que sobreviven de las remesas de dólares enviadas por trabajadores inmigrantes, quienes tuvieron que emigrar del país por falta de empleo asalariado y con suficientes prestaciones sociales? 

4. Por el deficiente reparto de la riqueza en el siglo XXI, es importante votar en 2024 por un candidato presidencial de centro izquierda, un izquierdista neoliberal o un neoliberal con fuerte tendencia social. Millones de mexicanos han acudido a los gobiernos federales y estatales, para solicitar programas sociales para sobrellevar el desempleo y la marginación social. En este numeroso grupo, se incluyen adultos mayores sin jubilación, madres solas (divorciadas, solteras y viudas), discapacitados, jóvenes que no consiguen empleo, campesinos e indígenas. 

El actual gobierno de López Obrador había registrado alrededor de veinticinco millones de beneficiarios de los programas sociales, dentro de una población de casi ciento veintinueve millones de ciudadanos mexicanos. Como se sabe, muchas empresas mexicanas y extranjeras discriminan a los mexicanos por edad (18 a 35 años es su rango), sexo (masculino es su preferencia), experiencia laboral (exigen uno a cinco años), preparación académica (piden nivel de licenciatura) y conocimientos de tecnología (solicitan complejos y variados programas de software). 

Entonces, se requiere un presidente que promueva la creación de empleos e infraestructura urbana y social y amplíe la cobertura de los programas sociales (ayudantías, becas, préstamos expeditos con bajo interés y prestaciones), frente a la insuficiencia en la apertura de trabajos formales en todo el país y la falta de condiciones adecuadas de los posibles laborantes. 

5. ¿Puede ser un buen presidente de la república un candidato que provenga de la “periferia política y administrativa”, sin haber ocupado puestos de elección popular e importantes cargos del poder ejecutivo (gobernador o alcalde)? 

6. ¿Puede desarrollar un buen trabajo administrativo un candidato que salga de las “aislacionistas” cámaras federales de legisladores, sin haber llevado a cabo variadas decisiones ejecutivas de alto nivel que afectan a un estado y sin haber entrado en contacto directo y constante con las necesidades del pueblo que gobierna? 

7. En el nivel estrictamente económico, ¿puede ser un apropiado candidato presidencial el distinguido economista mexicano Agustín Carstens por sus prominentes estudios de economía en la Universidad de Chicago, su positiva experiencia en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, en el Banco de México, en el Fondo Monetario Internacional y en la asociación de Bancos Centrales del mundo?