viernes, 25 de abril de 2014

"SIETE PALABRAS COTIDIANAS" DEL CHIHUAHUENSE HUMBERTO PAYAN FIERRO: VIOLENCIA MEXICANA Y NARRADOR ESPIRITUAL

SIETE PALABRAS COTIDIANAS” DEL CHIHUAHUENSE HUMBERTO PAYÁN FIERRO: VIOLENCIA MEXICANA Y NARRADOR ESPIRITUAL

ÓSCAR ROBLES


         En el cuento inédito “Siete palabras cotidianas” de Humberto Payán Fierro, un empleado camina por una ciudad seriamente afectada por el crimen y la violencia para visitar a su esposa en el hospital. Ora en la catedral, se bolea los zapatos en la plaza, bebe un whiskey en un bar y en el hospital duerme una plácida siesta en la cama donde está su esposa. Pero una situación inédita, sobrenatural y misteriosa ocurre en su itinerario urbano: Lo vigilan unos extraños personajes. En general, destaca en la trama de este reciente cuento, recién hecho como pan casero, el terrible trasfondo del crimen y la violencia en México, conocida popularmente como “inseguridad”; la reflexión religiosa; y, en especial, emerge en el tejido narrativo la creación de un narrador muy original, complejo y ambiguo: Una especie de “narrador espiritual” o ángeles.
         En primer lugar, Payán describe el contexto social de la violencia mexicana propia del siglo XXI sin referencias históricas concretas. Este contexto aparece a través de los comentarios y la experiencia individualizada del personaje principal y de algunos personajes incidentales. Este factor narrativo es muy diferente a las narrativas nacionales dominantes en la literatura mexicana y, sobre todo, en los medios de comunicación masiva nacionales, en los cuales los hechos violentos y los propios criminales son el centro, ocupan mucho espacio en estas narrativas literarias o periodísticas y las descripciones son mas negativas y atroces, propias del sensacionalismo, desplazando las posibles soluciones a dicho problema tan grave del siglo XXI. En contraste, el cuento de Payan resalta más la visión del ciudadano común y, en especial, la espiritualidad y la familia.
      En segundo lugar, las referencias religiosas son muy apropiadas para un mundo sumido en la violencia, pues el empleado protagonista cuestiona y remodela su visión personal sobre su relación con Dios y la religión cristiana. El personaje principal sufre una crisis espiritual y expone, por ejemplo, un concepto humanista sobre el papel de La Biblia en la historia y ha confesado a sus amigos que este libro clave “tenía mucho más trazos humanos que divinos” (Payán 1). Asimismo, la religión cristiana tiene una doble perspectiva en la conciencia del protagonista: Como una histórica represión moral a los humanos y como una fe muy personal y espiritual, practicada con constantes y diarias oraciones a Dios por parte de este empleado común (4). Finalmente, el empleado asume la religión como una expresión artística en la contemplación estética de las imponentes iglesias y ve a las propias iglesias como un espacio sagrado para orar y comunicarse con Dios (4).
     En tercer lugar, esta situación externa (crisis social) y la situación interna del personaje central (la conciencia) se potencian con la configuración clave y original del narrador colectivo: Un narrador testigo y, por ende, un narrador personaje, pero sumamente misterioso y complejo. Este narrador colectivo es precisamente uno de los elementos estructurales más interesantes y, semánticamente, aparece como uno de los aspectos más “nutritivos” y ricos del cuento, pues encarna una especie de “guardián” del ser humano o protagonista del cuento. Asimismo, el narrador mismo es un paradigma necesario de la espiritualidad universal y transhistórica de toda época, frente a la difícil y violenta realidad objetiva. Este relator aparece varias veces mediante los pronombres y los verbos en primera persona de plural y algunas veces desaparece para dar paso a las situaciones externas e internas del angustiado empleado. De esta manera, este narrador colectivo se convierte en un vehículo para desarrollar la intriga del cuento. Al comienzo del cuento, este narrador luce como una especie de equipo de filmación o de periodistas de la televisión que capta la cotidiana y simple caminata del protagonista por la ciudad moderna y dice lo siguiente: “Ya sabíamos que [el empleado] venía hacia nosotros” (Payán 1). Luego, más adelante, este narrador revela un interesante y desconcertante cariz espiritual e informa hacia la mitad del cuento que el narrador actúa como un protector: “Nosotros seguíamos a su lado. . .” (4). 
En particular, el narrador mantiene su ambigüedad y misterio en todo el cuento. Por un lado, el personaje principal al parecer ignora la presencia del narrador-personaje. Por otro, este relator desaparece misteriosa y mágicamente como una presencia espiritual o angelical en dos ocasiones, según confiesa la propia voz narrativa (Payán 4, 5). El narrador se vuelve más complejo a medida que la narración [“su narración”] avanza hacia el final del cuento. Por ejemplo, este interesante personaje espiritual interviene en la relación entre el empleado y su esposa dentro del hospital: “[La esposa] le dijo y [el narrador] le dijimos” (5). Asimismo, el narrador influye en las propias decisiones del empleado: “Pero nosotros le hacíamos vacilar” (5). En el párrafo final del cuento, el narrador prosigue con su misteriosa identidad espiritual, al mismo tiempo concreta y ubicua, y luego cierra con una desconcertante palabra que es, curiosa y extrañamente, una creación propia del agobiado y angustiado empleado: El personaje principal va “hacia yosotros”, es decir, ocurre la aparente fusión del protagonista y del narrador colectivo (6). Así pues, este misterioso narrador espiritual puede ser identificado con la figura sagrada de los ángeles de la guarda. En general, el empleado sufre de una crisis espiritual en medio de la violencia y una falta de paz interna y esto es el verdadero centro narrativo del cuento. Es decir, la situación subjetiva, espiritual, es la clave de toda la trama. En consecuencia, la simple y profunda siesta en la cama del hospital, al lado de su esposa, le da una profunda paz temporal. De esta manera, la misteriosa y sobrenatural integración final del empleado con el ubicuo narrador espiritual refuerza su vivir en medio del mundo en crisis, mundo degradado y urbano propio del siglo XXI.
En conclusión, “Siete palabras cotidianas” de Humberto Payán privilegia el espíritu y la conciencia interior frente a un agresivo entorno social dominado por la violencia y el crimen y resalta a la misma religión cristiana frente a las perturbadoras relaciones sociales dominantes, materiales, criminales y violentas. Finalmente, este cuento contemporáneo destaca a la familia como un núcleo clave de unidad, paz y amor. De esta forma, este inédito y original cuento de la segunda década del siglo XXI concentra su fuerza en el diseño de un contexto social urbano en gran crisis; en el enfoque nacional y universal de los problemas sociales con la ausencia de referencias geográficas concretas; y, sobre todo, en la creación del narrador colectivo, ambiguo y espiritual: Encarnación bella y creativa de los misteriosos ángeles cristianos.
Este narrador o relator colectivo al final de cuentas es novedoso, original, creativo, poderoso y clave en la resolución de la trama del cuento. Este narrador se quintaesencia en la palabra final del relato “yosotros”. Dentro de la trama general, se realza el sutil conflicto central del cuento: La falta de paz espiritual en el ciudadano común del nuevo milenio, quien vive debatiéndose entre la estricta sobrevivencia material y entre la crudelísima violencia criminal.
Humberto Payán Fierro estudió la maestría en Literatura Hispanoamericana en la Universidad Estatal de Nuevo México y es profesor de tiempo completo en la Facultad de Filosofía y Letras en la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH). Es autor de la colección de cuentos El oficio de pensarte (Chihuahua: Universidad Autónoma de Chihuahua, 2006). Este importante libro incluye diversos cuentos de gran calidad narrativa, tales como “El secreto de tu cuerpo”, “Alejandra, el nombre de las cosas”, “La pregonera”, “Atrás de la ventana”, “El juego de la puerta”, “El día que soñó a su padre” y “El oficio de pensarte”. En su examen de estos textos narrativos, Martha Estela Torres subraya el papel importante de los “juegos temporales” en el diseño de las tramas de dichos cuentos, según una reseña crítica de El oficio de pensarte (2).
En general, Payán se ha destacado por ser un sutil, profundo y original cuentista, desde sus primeros cuentos publicados durante la década de los ochenta en la famosa sección Cosecha de El Heraldo de Chihuahua, la cual era editada por la entonces Escuela de Filosofía y Letras de la UACH hasta su gran cuentario El oficio de pensarte y el cuento inédito “Siete palabras cotidianas”. Algunas de sus historias sobresalen por su fino erotismo y por su visión muy humana sobre el ciudadano común. La mayoría de sus cuentos se ubican en la ciudad de Chihuahua. El autor es hijo del ilustre escritor y periodista deportivo Humberto Payán Franco, autor de Más allá del Conchos y Perfil de un gigante, la celebre biografía del beisbolista superestrella nativo de la ciudad de Chihuahua, el legendario Héctor Espino.



Obras citadas
Payán Fierro, Humberto. El oficio de pensarte. Chihuahua: Universidad Autónoma de
Chihuahua, 2006.
“Siete palabras cotidianas.” Unpublished short story, 2014.
Torres Torres, Martha Estela. “Rutas creativas en El oficio de pensarte de Humberto Payán
Fierro.” Synthesis. Revista de la Universidad Autónoma de Chihuahua 46 (2008): 1-3.

REFLEXIONES SOBRE LA SOCIEDAD MEXICANA Y SOBRE DIOS EN "TWEETS"

REFLEXIONES SOBRE LA SOCIEDAD MEXICANA Y SOBRE DIOS EN TWEETS

ÓSCAR ROBLES

1. MORAL PÚBLICA

Frente a materialismo, consumismo, corrupción y violencia, se requiere una remodelación moral en México: Familias, escuelas, iglesias, medios de comunicacion masiva.

2. MÁS CENTROS COMUNITARIOS EN COLONIAS

Faltan centros comunitarios modernos en miles de colonias en México, con psicoterapeutas familiares, talleres de arte, maestros de educación física, computadoras y otros servicios más. En suma: Se necesita más cultura positiva, creativa y constructiva.

3. EL CARRO: PERSONAJE CENTRAL DE LAS CIUDADES

Los vehículos automotores desarrollan en extremo el individualismo, la arrogancia, el egoísmo de la gente, además de ser un buen transporte.



4. GRANDES PROBLEMAS DE MÉXICO


Inseguridad pública, desigualdad económica y corrupción gubernamental: Tres problemas grandes para todos los nuevos gobiernos de México.

5. MÉXICO

México, país de contrastes: Profundo catolicismo y artera violencia, espiritualidad y pecado, fe y crimen.

6. MEXICANA CONFIANZA

Yo sólo confío en mi familia, en unos cuantos amigos y en los tarahumaras.

7. DIOS
                  Dios es transhistórico y no sexenal y en verdad castiga.

SABIDURIA Y MORAL EN "EL LIBRO DEL SIRACIDA'" O DEL "ECLESIASTICO"

SABIDURÍA Y MORAL EN EL LIBRO DEL SIRÁCIDA O DEL ECLESIÁSTICO

ÓSCAR ROBLES

El Libro del Sirácida o del Eclesiástico es un libro del Antiguo Testamento. Es un libro muy importante en La Biblia, pues tiene sabiduría y moral cristiana en quintaesencia, las cuales son contenidos muy apropiados para estos tiempos tan críticos, violentos y materialistas del siglo XXI.

martes, 22 de abril de 2014

LA UNIVERSIDAD DE CONNECTICUT Y SU CUARTO TITULO EN EL BASQUETBOL UNIVERSITARIO DE LOS ESTADOS UNIDOS

LA UNIVERSIDAD DE CONNECTICUT Y SU CUARTO TÍTULO EN EL BASQUETBOL UNIVERSITARIO DE LOS ESTADOS UNIDOS
                                          
ÓSCAR ROBLES

         Finalmente, los Huskies de la Universidad de Connecticut se llevaron el campeonato de la National Colleges Athletic Association (NCAA) en 2014, tras el candente y competido torneo concentrado en el famoso “March Madness”. En estas finales de campeonato ocurridas en el pasado marzo, hubo grandes sorpresas y fueron eliminados precisamente todos los equipos clasificados como número uno en las cuatro grandes regiones de los Estados Unidos, tanto Florida como Arizona, Virginia y Wichita State.
         En el pasado “March Madness” jugaron los sesenta y cuatro mejores equipos de la NCAA y estas universidades fueron divididas en las tradicionales cuatro regiones norteamericanas del este, el medio oeste, el oeste y el sur, como todos los años desde hace varias décadas. Fueron “sembrados” como equipo número uno las universidades de Virginia (este), Wichita State (medio oeste), Arizona (oeste) y Florida (sur). De este modo, los Huskies de “UConn”, como es conocida popularmente en los Estados Unidos, obtuvieron su cuarto campeonato nacional universitario al derrotar a los tradicionalmente poderosos Wildcats de la Universidad de Kentucky, los cuales son el equipo número dos en toda la historia de la NCAA con más campeonatos nacionales dentro del deporte universitario norteamericano.
         Algunos expertos en basquetbol universitario piensan que la Universidad de Connecticut puede ganar otro campeonato nacional más en 2015, pues sus jugadores son jóvenes. Los Wildcats de la Universidad de Arizona (UofA) es otro fuerte candidato para ganar el campeonato nacional. Sin embargo, UofA está a punto de perder a su gran y novato jugador Aaron Gordon, quien declaró recientemente que entrará a la próxima sesión de selecciones de jugadores universitario de la poderosa National Basketball Association (NBA).
         He aquí una lista de las más importantes universidades con más campeonatos nacionales de la NCAA, según el sitio www.wikipedia.org:
1. University of California in Los Angeles (UCLA), once campeonatos.
2. Kentucky, ocho.
3. North Carolina, cinco.
4. Indiana, cinco.
5. Connecticut, cuatro.
6. Duke, cuatro.
7. Louisville, tres.
8. Kansas, tres.
9. Florida, dos.
10. Michigan State, dos.
11. North Carolina State, dos.
12. Cincinnati, dos.
13. San Francisco, dos.
14. Oklahoma State, dos.
15. Syracuse, uno.
16. Maryland, uno.
17. Arizona, uno.

    El año pasado Louisville ganó el campeonato nacional frente a Michigan, pero este año ambos equipos no pudieron llegar otra vez a la final y dejaron el sitio de honor para Connecticut y Kentucky. En 2013 y 2014, dos equipos universitarios de Kentucky han llegado a la final de la NCAA.

LOS MEJORES DIEZ FUTBOLISTAS DE TODA LA HISTORIA EN EL MUNDO

lunes, 21 de abril de 2014

MARIA NOVARO Y EL "CINE DE MUJERES" EN MEXICO (1988-2002)

MARÍA NOVARO Y EL CINE DE MUJERES EN MÉXICO (1988-2002)
                            
ÓSCAR ROBLES


Durante el periodo 1988-2002, la mayoría de los filmes dirigidos por mujeres mexicanas construyen nuevas y poderosas identidades femeninas y nacionales. Estas directoras representan la emergencia de un Cine de Mujeres como un subgénero del Nuevo Cine Mexicano de finales del siglo XX. Las directoras y los directores de esta novedosa vertiente del cine nacional son conocidos como “La Generación de los Noventa”. 
En especial, las directoras de dicha generación proponen nuevos personajes femeninos, muy diferentes de las dos tradicionales imágenes femeninas —la prostituta y la madre sufrida—, las cuales fueron creadas y difundidas por el dominante cine patriarcal en México durante muchas décadas. Así pues, la prostituta o la mala mujer y la madre sufrida o la Madrecita Santa son asociadas usualmente a los arquetipos históricos de La Malinche y de la Virgen de Guadalupe. Particularmente, Elise J. Rashkin piensa que estos dos personajes femeninos patriarcales del cine mexicano son parte de “the reproduction of the social order within the context of a clearly patriarchal nation-state” (2). Reaccionando contra estos personajes “patriarcales” de la mujer, las directoras del fin del siglo XX crean poderosas e independientes protagonistas con más modernos y realistas conflictos, como una manera de reflejar a la sociedad mexicana de las décadas de los ochenta y de los noventa. Por ejemplo, Rashkin considera que estas destacadas directoras “attacked the patriarchal and exclusionary ideologies” “by transforming the central myths and narratives of national cinema” (26). Dentro del citado Cine de Mujeres, María Novaro (1950—) es la más poderosa directora mexicana de ese periodo y, aun, de los últimos veinticinco años. 
Para varios críticos y estudiosos del cine mexicano, Novaro es la figura emblemática del Cine de Mujeres en el fin del siglo XX. Ella crea personajes de madres solteras que tienen relaciones sexuales libres y de madres que trabajan y viven con sus parejas, sin el autoritarismo y la moralidad de la familia patriarcal. Por ejemplo, Lola (1989) establece una profunda y simbólica relación entre la joven y conflictiva madre Lola y la sociedad civil de la Ciudad de México que vivió el terrible impacto del temblor de 1985. En tanto, El jardín del Edén (1993) muestra identidades femeninas y de la frontera, radicando y trabajando en Tijuana, Baja California Norte, la más importante ciudad en la frontera mexicoamericana. En ambos filmes, Novaro desplaza de la trama principal la dominante y autoritaria imagen del padre, símbolo histórico del Estado mexicano, y disminuye su papel en la nueva y desintegrada familia mexicana de fines del siglo XX. En consecuencia, sus poderosas narrativas son más femeninas y anti-patriarcales, y se enfocan más en la sociedad civil y en la nación más que en el paternalista y autoritario Estado mexicano. De este modo,  Lola y El jardín del Edén integran con Danzón (1991) lo que se puede llamar La Narrativa Cinemática de la Madre Mexicana.


DANZON (1991) DE MARIA NOVARO, UNA DE LAS CIEN MEJORES PELICULAS DEL CINE MEXICANO


PORTADA DE LA VIDEOCINTA LOLA (1989) DE MARIA NOVARO


FOTOS DE LA CONTRAPORTADA DE LA VIDEOCINTA LOLA (1989) DE MARIA NOVARO


1.  EL CINE DE MUJERES EN MEXICO EN LAS DECADAS DE LOS OCHENTA Y LOS NOVENTA


Durante el periodo 1988-2002, prominentes directoras mexicanas dirigieron más de veinte películas de largometraje y sus filmes participaron en algunos festivales internacionales de cine, tales como Cannes y La Habana. Algunos de estas importantes películas son El secreto de Romelia (1988) de Busi Cortés, Novia que te vea (1992) de Guita Schyfter, El jardín del Edén de María Novaro y Entre Pancho Villa y una mujer desnuda (1994) de Sabina Berman e Isabelle Tardan. Además de las citadas directoras, destacan también Marisa Sistach, Dana Rotberg, Eva López Sánchez y Leticia Venzor. Varias de estas cineastas tuvieron experiencias académicas y/o profesionales similares. Por ejemplo, todas ellas crean un Cine de autor y un Cine de Mujeres, algunas estudiaron cine en las escuelas mexicanas y ellas en general controlan más la filmación, la producción, la exhibición, la publicidad y la distribución de sus propias películas.



FOTO DE UNA ESCENA DEL FILME ENTRE PANCHO VILLA Y UNA MUJER DESNUDA (1994) DE SABINA BERMAN E ISABELLE TARDAN

Generalmente, varias de estas películas de tales directoras mexicanas reflejan profundos cambios sociales y los cambios en la producción fílmica de los ochenta y de los noventa. Por ejemplo, más mujeres participan en al educación formal y tenían más empleos profesionales. Además, la mayoría de estas películas fueron coproducidas por un sistema más democrático y plural, incluyendo instituciones culturales internacionales (v. gr. Televisión Española), instituciones del Estado mexicano (v.gr. Instituto Mexicano de Cinematografía), gobiernos estatales mexicanos (v.gr. Gobierno del Estado de Veracruz) y negocios privados (v.gr. Macondo Cine Video). En suma, el Cine de Mujeres no fue solamente “a subgenre of Mexican cinema”, but “an historical phenomenon” (Rashkin 3). La mayoría de dichas directoras filmaron más durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) que en los años posteriores. Especialmente, el Nuevo Cine Mexicano es considerado como parte del proyecto económico neoliberal expansionista, cuyo gran representante es Salinas de Gortari. El Neoliberalismo fracturó el Nacionalismo Revolucionario, la ideología cultural del Estado mexicano. En consecuencia, se crearon nuevas identidades individuales, femeninas y nacionales en las películas del fin del siglo XX.
En este contexto social, cinematográfico y político, las directoras mexicanas re-conceptualizaron y re-textualizaron la posición de la mujer en la sociedad mexicana, propusieron personajes femeninos multidimensionales y articularon nuevas y alternativas identidades femeninas y nacionales, opuestas a la unidimensional y tradicional representación de la mujer en el cine patriarcal, altamente influido por el discurso ideológico del Estado mexicano. En particular, el Nuevo Cine Mexicano fue “the leading artistic cinema in Latin America” en los noventa, según David Maciel y Joanne Hershfield (249). Muchos de los filmes dirigidos por los directores y las directoras de México narran historias de familias desintegradas en contraste con el cine mexicano clásico y patriarcal, el cual enfatiza más la unidad de la familia bajo un padre autoritario. Algunos de estos filmes rompen con el control patriarcal en la familia tradicional y muestran historias originales, más cercanas a la realidad social: Madres solteras independientes o mujeres que hacen sus propias decisiones sobre empleo, amor, maternidad y sexualidad. Especialmente, Novaro, Schyfter, Cortés y Sistach construyen personajes femeninos que asumen una fuerza de resistencia en la familia patriarcal y en la sociedad capitalista durante los ochenta y los noventa. Por ejemplo, las tres primeras películas de largometraje de Novaro tienen madres solteras como protagonistas; Novia que te vea de Schyfter discute la relación entre las identidades mexicanas y judías; El secreto de Romelia de Cortes explora la sexualidad femenina, la historia personal y la historia social, la clase social y la raza, durante el periodo del presidente Lázaro Cárdenas (1934-1940); Serpientes y escaleras de la propia Cortés analiza la política mexicana pos-revolucionaria, el patriarcado, el machismo y el papel del Estado paternalista.
Finalmente, Elise J. Rashkin resume diversas ideas claves en torno al poderoso Cine de Mujeres en México durante las décadas de los ochenta y de los noventa en “Conclusion, Border and Boundaries of National Cinema”, la cual es la gran conclusión de su gran libro Women Filmmakers in Mexico. The Country of Which We Dream (2001). Entre estas ideas claves de Rashkin sobresalen las siguientes seis: 1) Las directoras re-definen el cine nacional con una diversidad de estilos artísticos y construyendo un auténtico Cine de autor; 2) las directoras y los directores asumen un papel de intelectuales porque definen a la nación y a la mexicanidad con sus filmes; 3) los filmes de las directoras representan una liberación fílmica de las minorías, tales como mujeres, grupos religiosos (v.gr. judíos), indígenas, homosexuales y pobres; 4) el Cine de Mujeres incluye a las mujeres como una activa y creativa parte de la nación mexicana; 5) las cineastas redefinen el cuerpo femenino como placer, como un vigoroso “campo de batalla” entre los sexos; 6) el Cine de Mujeres altera las identidades hegemónicas, tanto femeninas y masculinas y como nacionales, todo lo cual “empodera” o fortalece y transforma al público espectador.
Como parte de un Cine de Mujeres que se prolonga un poco hasta el nuevo milenio, María Novaro sigue siendo la directora más importante en el tránsito del siglo XX al siglo XXI. Asimismo, ella es uno de los más importantes cineastas del Nuevo Cine Mexicano del fin del siglo XX junto con Carlos Carrera, Nicolás Echeverría y otros directores más de ambos sexos. En general, Novaro ocupa un lugar importante en la historia del cine mexicano y, en especial, Danzón ha sido considerada como una de las Cien Mejores Películas del Cine Mexicano en algunas encuestas.



CONTRAPORTADA DE LA VIDEOCINTA DANZON (1991) EN SU EDICION VENDIDA EN LOS ESTADOS UNIDOS



FOTOS DE LA CONTRAPORTADA DEL DISCO COMPACTO DE DANZON (1991) DE MARIA NOVARO

Tras el éxito artístico y comercial de sus tres primeros largometrajes, Novaro ha incorporado nuevos e importantes tópicos a sus historias de mujeres, durante la primera y la segunda década del siglo XXI. De esta manera, dos de sus más recientes filmes reflejan nuevos problemas sociales y nuevos conflictos de las mujeres en México. Estas dos películas de largometraje son una forma de recoger el “Inconsciente Político” de la nación, de acuerdo al concepto de Fredric Jameson en Political Unconscious. Narrative as Socially Symbolic Act (1994). Asimismo, estos dos filmes son también una manera de representar artísticamente fenómenos sociales que “palpitan” dentro de lo que puede llamarse el Inconsciente Nacional de México. En primer lugar, Sin dejar huella (2000) incluye el crimen, la impunidad, la violencia, el viaje y la solidaridad femenina en el destino de dos mujeres poderosas e independientes: Una madre mexicana y una mujer soltera y profesionista, nativa de España. En segundo lugar, Las buenas hierbas (2010) se centra en la vida de una mujer vieja que padece la dolorosa enfermedad de Alzheimer y enfrenta una difícil y conflictiva relación con su hija adulta.  En general, las películas de Novaro construyen identidades femeninas y nacionales muy poderosas, con narrativas significativas y dramáticas y con un estilo visual muy original y, a veces, altamente poético. Novaro, nativa de la Ciudad de México, recibió un merecido homenaje hace unas semanas, dentro del Festival de Guanajuato 2013.


LAS BUENAS HIERBAS (2010), QUINTO LARGOMETRAJE DE MARIA NOVARO (FOTO DEL DISCO COMPACTO)

En suma, el poderoso Cine de Mujeres de las décadas de los ochenta y de los noventa está ligado profundamente a los orígenes de Novaro en el cine mexicano. En especial, ese “subgénero” del Nuevo Cine Mexicano es el contexto cultural clave para la creación de sus tres primeros y excelentes largometrajes: Lola, Danzón y El jardín del Edén. 


CONTRAPORTADA DEL DISCO COMPACTO DEL FILME  LAS BUENAS HIERBAS (2010) DE MARIA NOVARO

PRINCIPALES PELÍCULAS DIRIGIDAS POR MUJERES EN MÉXICO (1988-2002), ORGANIZADAS CRONOLÓGICAMENTE

TÍTULO
AÑO
DIRECTORA

1. El secreto de Romelia
1988
Busi Cortés

2. Los pasos de Ana
1988
Marisa Sistach

3. Lola
1989
María Novaro

4. Intimidad
1989
Dana Rotberg

5. Danzón
1991
María Novaro

6. Ángel de fuego
1991
Dana Rotberg

7. Serpientes y escaleras
1991
Busi Cortés

8. Anoche soñé contigo
1992
Marisa Sistach

9. Novia que te vea
1993
Guita Schyfter

10. Dama de noche
1993
Eva López Sánchez

11. El jardín de Edén
1993
María Novaro

12. Sucesos distantes
1994
Guita Schyfter

13. Entre Pancho Villa y una mujer desnuda
1994
Isabelle Tardan y Sabina Berman

14. El amor de tu vida S.A.
1994
Leticia Venzor

15. La línea paterna
1995
Marisa Sistach y José Buil

16. Sin dejar huella
2000
María Novaro

17.  . . . Nadie te oye . . .Perfume de violetas
2001
Marisa Sistach
18. Otilia Rauda, una mujer del pueblo
2002
Dana Rotberg


PORTADA DE LA VIDEOCINTA ENTRE PANCHO VILLA Y UNA MUJER DESNUDA (1994) DE SABINA BERMAN E ISABELLE TARDAN

CONTRAPORTADA DE LA VIDEOCINTA ENTRE PANCHO VILLA Y UNA MUJER DESNUDA (1994) DE SABINA BERMAN E ISABELLE TARDAN 


Obras citadas
Jameson, Fredric. Political Unconscious. Narrative as Socially Symbolic Act. Ithaca: Cornell
University Press, 1994.
Maciel, David y Joanne Hershfield. Mexico’s Cinema. A Century of Film and Filmmakers.
Wilmington, DA: A Scholarly Resources, 1999.
Rashkin, Elise J. Women Filmmakers in Mexico. The Country of Which We Dream. Austin:
University of Texas, 2001.

LA TIENDITA DE LAS AGUAS FRESCAS Y LAS HISTORIETAS

  LA TIENDITA DE LAS AGUAS FRESCAS Y LAS HISTORIETAS   POR ÓSCAR ROBLES            Ya no resplandecían los coloridos barriles de vid...